La Universidad de Rostock, en Alemania, evalúa el impacto ambiental de las plantas de papa especialmente desarrolladas para producir cianoficina en sus tubérculos y hojas, un compuesto que se puede utilizar para hacer plásticos biodegradables.
La cianoficina es una proteína producida por cianobacterias (también conocidas como algas verde-azules) y algunas otras bacterias, que les sirve a estos organismos para almacenar nitrógeno. Uno de sus componentes es un polímero –llamado poliaspartato-, el cual puede ser utilizado como plástico biodegradable.
Estos polímeros biodegradables se pueden producir en las plantas, utilizando la planta como un tipo de biorreactor. Así, las plantas podrían actuar como materias primas renovables para el suministro de sustitutos de los plásticos a base de petróleo, que no son biodegradables.
El objetivo con esta investigación es producir la cianoficina en las plantas como una alternativa más barata y eficiente que la síntesis química. Además, se puede producir cianoficina en cultivos de papa destinados a la producción de almidón, de modo que se obtengan los dos productos al mismo tiempo y con una reducción significativa en los costos de producción.
La investigaciónDurante años, los investigadores han estudiado la producción de cianoficina en las plantas. Gracias a un proyecto financiado por el Ministerio Federal Alemán de Alimentación, Agricultura y Protección al Consumidor (BMELV), los científicos de varias universidades alemanas desarrollaron papas con cianoficina y las ha examinado con detalle en el invernadero.
Ahora, los investigadores están utilizando las papas como un modelo de planta para probar en el terreno en qué medida se pueden usar estas plantas como sistemas de producción seguros para bioplásticos.
Se están realizando pruebas de campo con el fin de determinar si las condiciones del suelo afectan la producción y si existen efectos para los organismos no objetivos.Además, otro proyecto –financiado por el Ministerio Federal Alemán de Educación e Investigación (BMBF)- se encuentra estudiando las papas con cinoficina, específicamente, si la modificación genética provoca cambios en las características de las papas.
Por ejemplo, si la papa es menos sensible al frío, aquellas que se queden en el suelo tendrán más probabilidades de sobrevivir en el invierno.
Además los investigadores están evaluando si el proceso de pudrición de estas papas es diferente.
Tomado de: gmo-safety.eu
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